De la obra para el montaje

Obra: “El cáliz amargo de una santera”.

Autor: Jan Thomas Mora Rujano. 

Tres personajes nos cuentan una historia donde el contexto es la religión. La fe católica y la creencia en la religiosidad popular hace que confluyan en Cáliz, un sacerdote pecador y Éxodo, una ex-monja iniciada en la santería (ambos, hermanos de sangre), la luz y la oscuridad, lo sagrado y lo profano. El cordero de dios, que en la religión católica quita el pecado del mundo, acá significa el maullido, lo oscuro, el rumor, la pérdida de la espiritualidad y los valores humanos, representado en la figura de un gato negro. Y la presencia de Elías un joven que se inicia en la religión santera, se ve envuelto en el medio de un asesinato y los secretos que guardan Cáliz y Éxodo en esa Iglesia con su sótano que los resguarda. 

El cáliz amargo de una santera, nos habla de esa dualidad presente en el ser humano. Son esas máscaras que esconden el verdadero rostro de las instituciones religiosas de poder. Es ésta una obra que nos deja una reflexión sobre la condición humana. 

Mi interés en realizar este montaje se centra en el hecho de cómo está narrada la historia. En la fragmentación y en la idea de crear una atmósfera escénica que recree ese mundo energético que nos acompaña. En la religiosidad como forma concreta en la que los grupos e individuos viven su religión. 

Por ello El cáliz amargo de una santera llega a los escenarios nacionales, para que a través del teatro nos veamos reflejados en ese espejo de la escena. Un espejo que nos devuelve la imagen de lo que está viviendo la humanidad, un estado de violencia y desencuentro perenne. El ser humano está huérfano, busca regresar a la religiosidad, aferrarse a una creencia, a algo que lo salve, pero sin medir las consecuencias de sus actos. 

“En la religiosidad popular se manifiestan y sedimentan todas las resultantes del cultivo de lo humano, como la suma de todos sus ámbitos: lo artístico, lo político, lo económico, lo social y lo psicológico, todo englobado por una perspectiva de trascendencia o de lo absoluto.” (Maldonado. L Religiosidad popular).

En Venezuela como en otros pueblos hermanos de Latinoamérica confluye la religión católica al lado de expresiones populares como los aportes africanos y los aportes indígenas. Asimismo ocurre con los cultos sincréticos: el curanderismo, el espiritismo, y la santería. Por ello la pertinencia de traer a escena este tema tan trascendente y que forma parte del imaginario de los pueblos latinoamericanos.

Maigualida Gamero. Directora del montaje.